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«..Vuelan mariposas cantan grillos la piel se me pone negra y el sol brilla brilla y brilla..» canta inti Illimani

No puede sino provocar desazón, el desconocimiento que tienen los trabajadores que desean organizarse, respecto de las organizaciones sindicales de nivel medio o superior que existen. Ni nombres, ni domicilios, pareciera que se les hablara de algo etéreo, imposible de ubicar.
En efecto, muchos de quienes inician el proceso de organización no saben que existen federaciones, confederaciones y centrales sindicales, entidades a las que deberían concurrir para informarse respecto de los quórum que se requieren para conformar una organización sindical, la confección del estatuto respectivo y cómo solicitar el ministro de fe para la constitución del sindicato. Por cierto que también están como guías en esta primera etapa las inspecciones del trabajo y también debería existir algún tipo de información en municipios, organizaciones sociales e incluso los partidos políticos, que debieran actuar sin afán proselitista.
Sin embargo, o no hay o no existe suficiente difusión y son muchos los trabajadores que no logran llegar a puerto, ya sea por que son sorprendidos en el intento o bien porque pierden las esperanzas.

2.- De la misma manera, entre el viernes previo a las elecciones del 7 de mayo y el día lunes posterior a dicho proceso, atendimos 4 casos que nos dejaron claro que cuando se logró constituir la organización sindical, los primeros dirigentes electos se encontraron con otro problema tanto o más complicado que el primero. La falta de conocimiento sobre las diversas materias, desde lo que significa un derecho adquirido hasta la confección de un proyecto de contrato colectivo.
En que culminan muchos de estos casos?, En que los noveles dirigentes terminan entregando sus procesos en manos de inescrupulosos que no solo les cobran honorarios altos sino también, y lo más grave, los desorientan con el único fin de tenerlos cautivos.
Compañeros que comienzan su camino. No se queden con lo primero que encuentren, sean cautos y hasta desconfiados si es preciso.
No confíen en quienes ofrecen hacer todo por ustedes. El movimiento sindical tiene casos de corrupción que aumentan cada día, pero también hay gente digna y decente dispuesta a apoyar a quienes luchan por sus derechos. Ellos les pueden guiar y orientar y ustedes, con las cosas, claras definir el camino a seguir, Y si llegan a integrarse a esas organizaciones clasistas solo les cobrarán una cuota mensual por socios y el pago de asesoría jurídica en caso de juicios.
Todo lo demás debe ser entregado sin costo, o lo suficientemente bajo como para que sea un beneficio.