En la Región de Magallanes se mantiene una
estricta vigilancia sanitaria para prevenir la Anemia Infecciosa Equina (AIE), una
enfermedad viral de declaración obligatoria que afecta exclusivamente a caballos,
yeguas, burros y mulas. Sin tratamiento ni vacuna disponible, esta patología
puede causar síntomas severos e incluso la muerte de los animales, lo que ha
motivado la acción coordinada del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), la Seremi
de Agricultura y los municipios de la región.
Desde la detección del caso índice a nivel nacional el 31 de diciembre de 2024, las
autoridades del SAG han intensificado los controles. A la fecha, se han fiscalizado
más de 3.300 establecimientos con équidos registrados en el sistema SIPEC y se
han muestreado 14.020 animales en distintas regiones del país, detectándose
ejemplares positivos en ocho de ellas.
En Magallanes, sin embargo, todos los resultados obtenidos hasta ahora han sido
negativos. El director regional (s) del SAG, Francisco Álvarez, explicó que la
labor preventiva en el territorio austral ha sido clave: “Durante este año hemos
muestreado 148 equinos pertenecientes a 22 establecimientos en distintas
provincias de la región, y afortunadamente todos resultaron negativos. Sin
embargo, eso no significa que bajemos la guardia. La vigilancia debe ser
permanente, especialmente considerando que la transmisión puede darse por
prácticas inadecuadas, como la reutilización de elementos cortopunzantes.”
Para fortalecer este trabajo, el SAG emitió la Resolución Exenta N° 477/2025, que
dispone medidas preventivas ante la emergencia nacional, entre ellas la
obligatoriedad del microchip para todos los équidos y la regulación del ingreso de
animales provenientes de otras zonas del país.
Además, desde el 1 de octubre de 2025 se constituyó una Brigada Equina AIE en
Punta Arenas, integrada por un médico veterinario y un inspector de apoyo. Esta
unidad ha recorrido el cordón periurbano de la ciudad, visitando hasta la fecha 10
establecimientos y muestreando 57 equinos, de los cuales 39 fueron
microchipeados por SAG y 18 controlados mediante lectura de chip. Hasta el
momento las muestras analizadas en laboratorio han salido negativas.
La Seremi de Agricultura, Irene Ramírez, destacó el trabajo interinstitucional y la
responsabilidad compartida entre el Estado y los propietarios de animales:
“Magallanes ha demostrado que la prevención es el camino más efectivo. El
esfuerzo del SAG, el apoyo municipal y la colaboración de los dueños de caballos
son fundamentales para mantenernos libres de esta enfermedad, además de
obtener un catastro actualizado de la población equina en este caso de la comuna
de Punta Arenas. Nuestro compromiso es resguardar la sanidad animal en nuestra
ruralidad»
Por su parte, el veterinario municipal de Punta Arenas, José Carreño, valoró la
coordinación lograda entre los distintos actores: “Hoy acompañamos al SAG en las
labores de identificación de equinos mediante microchip y en el muestreo para
detectar anemia infecciosa equina. Desde hace tres años, el municipio ha
impulsado la trazabilidad de los caballos, implantando microchips en 80
ejemplares y registrando a sus propietarios. Este trabajo conjunto busca
consolidar un sistema que permita, finalmente, erradicar la presencia de caballos
en las calles de la ciudad.”
Las acciones forman parte del Plan Anual de Vigilancia Regional de Anemia
Infecciosa Equina – Magallanes 2025, actualmente en ejecución, y cuyo objetivo
es garantizar la detección temprana y control de la enfermedad en la zona más
austral del país.
Con estas medidas, SAG Magallanes reafirma su compromiso con la sanidad
equina y la prevención epidemiológica, destacando la importancia de la educación,
la trazabilidad y la responsabilidad compartida para mantener el estatus sanitario
regional