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ESTUDIO REGIONAL DEL SML SOBRE RESULTADOS DE ALCOHOLEMIAS EN PANDEMIA LOGRA DISTINCION NACIONAL

El Servicio Médico Legal (SML) desarrolla diversos peritajes de manera permanente, por indicación de las instituciones judiciales competentes, destacando entre ellos los análisis de alcoholemia. Dicha temática cobró especial relevancia a nivel regional desde el inicio de la pandemia de SARS-CoV2, despertando incluso una inquietud académica, a través de una investigación científica que, a partir de aquella información, se hizo acreedora a una importante distinción nacional.

Así lo destacó el Dr. René Castro Cid, Director Regional del SML, al mencionar su proyecto de investigación “Alcoholemia y Pandemia: conducir en estado de ebriedad en la Región de Magallanes y la Antártica Chilena”, el cual se adjudicó este año la segunda mención honrosa en el XI Concurso Anual “Distinción Dr. Carlos Ybar”, certamen que promueve la investigación científica y está abierto a la comunidad forense nacional.

Este estudio desarrollado en Magallanes, a cargo del propio Castro, junto a los investigadores Kevin Butler Véliz y Claudio Lobos Gálvez, tuvo como objetivo evaluar los resultados de las alcoholemias realizadas en las muestras de sangre, de conductores que fueron derivados a establecimientos asistenciales habilitados, en los periodos de cuarentena total, bajo el Estado de Excepción Constitucional asociado a la pandemia, durante el año 2020, en la Región de Magallanes. Asimismo, permitió comparar dicho muestreo con períodos semejantes de años precedentes, en donde no existían restricciones de desplazamiento: 2018 y 2019, y con iguales períodos del año 2021, segundo año desde la declaración del Estado de Excepción, y primer año desde el comienzo del plan de vacunación contra el COVID-19.

CONSUMO IRRESPONSABLE

Sus resultados fueron bastante reveladores en relación a una prevalencia de hábitos de abuso en el consumo de alcohol marcadamente superior a los de un periodo normal, arrojando niveles de ingesta reñidos con la normativa, evidenciando una conducta irresponsable en gran parte de las y los conductores fiscalizados.

Este ejercicio comparativo consideró de partida que el alcohol es una de las drogas de mayor consumo, relacionada a conductas antisociales y a delitos entre quienes la consumen. “La conducción en estado de ebriedad es una de las principales causales de muertes y lesiones a nivel mundial, siendo el control preventivo por parte de las policías, una ayuda en la detección precoz de conductas riesgosas asociadas al consumo de este depresor del sistema nervioso central. Además, la conducción en estado de ebriedad es sancionada penalmente”, planteó el Dr. Castro.

En la práctica, el estudio arrojó que, durante el primer período de cuarentena del año 2020, un 66% de los conductores evaluados lo hizo en estado de ebriedad, en comparación con similares períodos, para los años 2018 (35%), 2019 (35%), y 2021 (36%). Durante el segundo período de cuarentena del año 2020, el porcentaje de conductores ebrios fue también significativo (50%), comparado con el 32% observado en 2018, 34% en 2019 y 37% en 2021.

Por ende, se colige que “las medidas preventivas asociadas al control policial y a la sanción penal no son suficientes para desalentar la conducción en estado de ebriedad, incluso ante medidas de restricción de desplazamiento de la población, como aquellas asociadas al Estado de Excepción Constitucional decretado durante la pandemia por COVID-19”.

Acerca de esta distinción, que se traduce además en una publicación científica en la Revista de Investigación Forense del ICY, la Seremi de Justicia y Derechos Humanos, Michelle Peutat, destacó que “es una noticia que nos llena de orgullo. Grafica el alto grado de profesionalismo de nuestro Servicio Médico Legal, al plantearse el desafío de establecer líneas de investigación como en el caso de alcoholemias, que puedan generar proyectos de interés para la comunidad científica, e incluso alentando un trabajo colaborativo con Instituciones de Nivel Superior e influyendo en las políticas públicas”. Ello, al ser los accidentes de tránsito asociados con el alcohol un problema de salud pública y seguridad pública.